Un sueño hecho realidad: carreras de coches de Mario Kart sobre circuitos reales construidos en casa
La primera sensación que se tiene al ver lo nuevo de Nintendo es que Mario Kart se ha hecho realidad. De hecho, gracias a una extraña pero interesante combinación, los coches de este videojuego son reales, el circuito es real y lo único virtual es la composición en «realidad aumentada» que se experimenta en la videoconsola, la popular Nintendo Switch.
Mario Kart Live: Home Circuit, que es como han denominado a esta nueva encarnación de la saga, se va a lanzar a mediados de octubre, coincidiendo con el 35º Aniversario de Mario, como 15º juego de la saga protagonizada por el icónico y bigotudo muñeco. El juego incluye además de todo lo necesario digitalmente para convertir la Nintendo Switch en un mando de carreras cuatro arcos de cartón que ayudan a delimitar las zonas del circuito y un coche teledirigido que es el alma física del juego en sí.
El coche a escala del famoso Kart de Mario va equipado con una cámara de vídeo, de modo que puede transmitir las imágenes subjetivas propias de este tipo de juegos a la consola. Tanto el motor del coche como la dirección se controlan desde la videoconsola, de modo que se puede girar, acelerar y frenar. En la pantalla, parte de lo que aparece es real: el suelo, los muebles, los arcos de las etapas y otros obstáculos. Y luego está lo virtual: el coche de Mario (el que se ve en pantalla) y los otros vehículos que participan en la competición, además de los marcadores y bonus que surgen al azar. Hay desde otros karts a naves voladoras pilotadas por tortugas y otros personajes, como Bowser Jr. y los Koopalings.
Aunque no deja de ser un juego infantil –en el que seguro que los padres también pasarán un buen rato– es una buena muestra de la capacidad de las nuevas tecnologías de realidad aumentada para cambiar completamente la experiencia de los videojuegos. Sus creadores, el equipo de Velan Studios, llevan desde 2017 experimentando con diversas fórmulas hasta dar con esta idea, que presentaron a Nintendo. Dicen que la creación de los circuitos es sumamente sencilla, al estar pensado para los más jóvenes, y que el juego respeta las «reglas» de la saga Mario Kart de toda la vida, de modo que es fácil entender cómo funciona cada premio, bonus y chisme que aparece por allí, que no son pocos. Es una combinación de creatividad y juego de acción, de lo real y lo virtual, que lleva las carreras de coches –un clásico entre los clásicos– a una nueva dimensión.