Cómo saber el año de un coche por la matrícula
Es importante conocer la edad de un coche cuando nos planteamos una compra de vehículo de segunda mano, y también si necesitamos tasarlo. Podemos saber el año del coche de muchas maneras. La primera y más evidente es consultar la ficha técnica o el permiso de circulación, pero puede que no tengamos esa documentación a mano, o bien que prefiramos calcular la fecha de matriculación del vehículo que tenemos delante de una manera aproximada. Otro método bastante fiable, pero con matices, es comprobar la matrícula, y determinar así el año.
Tipos de matrículas en España
Saber el año del coche por la matrícula es muy sencillo porque, a lo largo de los años, las matrículas han ido cambiando el formato, pasando de uno que se queda bastante limitado a otro nuevo con más posibilidades. Desde el principio de los tiempos, estos han sido los formatos de matrícula utilizados en España:
Provinciales hasta 1971
Desde 1.900 hasta 1.971, el formato incluye el identificador de provincia (una, dos o tres letras) y un número de seis cifras sin ceros a la izquierda (A-123456). Se denomina “provincial numérica”. Como curiosidad: el primer coche matriculado en España, el 31 de octubre de 1900, pertenecía a un ciudadano residente en las Islas Baleares y la matrícula fue PM-1. Aunque el sistema tardó varios años en ser unificado en toda España.
Provinciales a partir de 1971
Desde 1.971 hasta 2.000, el formato evoluciona manteniendo el identificador de provincia (una o dos letras), seguido de un número de cuatro cifras y un sufijo con una o dos letras, desde la ‘A’ hasta la ‘ZZ’ (AA-1234-AA). Se denomina “provincial alfanumérica”.
Europeas desde 2000 hasta hoy
Desde 2.000, se elimina la referencia a la provincia y se establece un código alfanumérico formado por un número de cuatro cifras, y tres letras (se excluyen las vocales, la ‘Ñ’ y la ‘Q’). Se trata del “modelo europeo” (1234-BBB).
Métodos para conocer el año de un coche por la matrícula
Método 1: Por año de matrícula
La clasificación que acabamos de exponer nos sirve de manera muy aproximada para saber de qué época es un coche, pero no nos sirve para determinar el año si no afinamos. Para hacer esto disponemos de diferentes herramientas. Las tablas de matrículas por años son útiles porque nos permiten estimar un rango de fechas mucho menor (por ejemplo, se puede decir que los matriculados en 2017 tienen placas entre la ‘JWN’ y la ‘KGN’), pero este método no es 100% fiable para vehículos antiguos, porque no tiene en cuenta el caso de que solicitemos una nueva matrícula. Sí que nos sirven para saber qué matrícula nos tocará cuando nos planteamos la compra de un coche nuevo.
No obstante, sólo es posible solicitar una nueva matrícula para el caso de que adquiramos un vehículo de segunda mano con placas del tipo provincial alfanumérica. En esos casos, sabremos a simple vista que el coche que tenemos delante con placas nuevas no es un modelo nuevo.
Método 2: Consulta a la DGT
Otras opciones válidas incluyen una consulta a la DGT para saber la fecha de matriculación de un coche. Aunque hay diversas formas de solicitar un informe a la DGT, la más cómoda y rápida es hacerlo vía Internet.
La DGT permite solicitar hasta un total de seis informes diferentes, pero los dos más habituales son el informe reducido y el informe completo.
El informe reducido, que puede ser suficiente en muchos casos, ofrece información sobre la fecha de la primera matriculación en España del vehículo y si hay alguna incidencia que impedirían la transferencia del vehículo o su circulación. Tiene la ventaja de que es gratuito, por lo que pedirlo antes de plantearse la adquisición de un vehículo de segunda mano es casi imprescindible.
El informe completo es mucho más exhaustivo. Incluye toda la información administrativa del vehículo y datos tan importantes como el kilometraje, el historial de la ITV y si el vehículo tiene algún tipo de carga. Así como detalles técnicos. Eso sí, es de pago: el coste del trámite para obtenerlo es de 8,67 euros. En este blog ya os hemos contado las diferencias que presentan los informes de la DGT y las 4 formas que hay de solicitarlos.
En resumen, dado que estos informes de la DGT nos dan más información de la que necesitamos, podemos recurrir a buscar en Internet una de las tablas de matrículas que hemos mencionado. Una opción muy válida si queremos satisfacer una simple curiosidad, pero por ejemplo, ante una compra de un vehículo de segunda mano lo idóneo es siempre acudir a fuentes oficiales.