Cuál es la manera correcta de frenar el coche
Frenar un coche es una acción en principio sencilla, basta con pisar el freno. Pero el estado de la carretera o del tráfico requieren de distintas técnicas de frenado. La manera correcta de frenar el coche siempre es hacerlo suavemente y de forma progresiva. Para garantizar una frenada suave y segura es importante mantener la distancia de seguridad. Esto puede evitar una colisión en el caso de tener que frenar de forma repentina.
Pisar el freno de forma suave evita perder el control del coche, algo que puede suceder si lo ejecutamos bruscamente (normalmente debido a una emergencia o un suceso inesperado). La velocidad va a determinar la fuerza de la frenada: a más rapidez mayor fuerza se necesita para detener el vehículo (y mayor distancia de seguridad). Por eso es importante respetar los límites de velocidad señalados en cada tramo de la vía. Unas ruedas desgastadas, unos frenos en mal estado, una carretera resbaladiza, la lluvia, la nieve y el barro añaden más tiempo a la distancia de frenado. Otra ventaja añadida de frenar suave es que ayuda a mantener el sistema de frenado del coche en buenas condiciones.
Para frenar de forma suave resulta clave estimar adecuadamente cuándo se debe presionar el pedal: cuanto más pronto empieces, más tiempo tendrás para detenerte suavemente. Primero disminuye la velocidad de forma gradual reduciendo las marchas, y después presiona el freno con una fuerza moderada. Es importante también que frenes en las rectas para que el coche se mantenga estable.
En una frenada de emergencia no da tiempo a reducir la velocidad con las marchas. Si el coche dispone del sistema ABS (evita que las ruedas se bloqueen en una frenada), la Dirección General de Tráfico (DGT) recomienda pisar el freno y el embrague a la vez hasta el fondo. Con un vehículo sin ABS también aconseja la misma acción, pero si notas que las ruedas se bloquean, “se debe aflojar ligeramente la presión del freno; si ha soltado demasiado vuelva a apretar”, explica la DGT.
Este organismo explica también la manera correcta de avisar a otros conductores de que se va a reducir la velocidad. Y no es encendiendo las luces de emergencia, como sucede con frecuencia, sino pisando el freno reiteradamente para que el conductor se dé cuenta al encenderse y apagarse las luces de freno. Siempre revisa los espejos para asegurarte de que es seguro continuar frenando.
En situaciones de emergencia en las no se ha podido detener el vehículo por completo con el frenado, entonces aplica el freno de mano para conseguirlo. Eso sí, nunca recurras a él si viajas a alta velocidad, porque el vehículo patinará.
¿Cómo frenar un coche en un semáforo? Con el freno motor o lo que es lo mismo: reduciendo las marchas. Imagina que te aproximas a uno y vas en tercera. Pues primero suelta el pedal del acelerador, luego pisa ligeramente el freno y, a la vez, embraga para bajar a segunda. De esta manera, se reduce la velocidad progresivamente y se frena de forma suave, lo que ayuda al buen mantenimiento de los frenos y el motor y, además, ahorra combustible.
En los coches Volvo, la tecnología City Safety provee al vehículo de un sistema de frenado que evita colisiones a velocidades por debajo de los 15 km/h. Cuando detecta un obstáculo, de forma automática activa el ABS. Está pensado para cuando se conduce por ciudad y te distraes al volante.
En definitiva, para detener el vehículo no siempre se necesita pisar el freno, puedes frenar con el motor. Cuando ejecutas correctamente la técnica de frenado no solo garantizas la seguridad de los ocupantes, también prolongas la vida útil de tu vehículo.