No dejes que esa pequeña grieta en tu parabrisas crezca
Parece que no tiene importancia. Íbamos circulando por una carretera con un poco de grava, y el vehículo que circulaba delante ha proyectado contra nuestro parabrisas un trocito pequeño de piedra, lo que muchos llaman de forma coloquial una china. Al rato nos fijamos que el impacto “ha dejado marca”, que puede ser desde una pequeña grieta hasta un simple puntito. ¿Podemos dejarlo correr?
Hay que arreglar esa pequeña grieta del parabrisas
La respuesta a la pregunta es no: no puedes pasar del tema, porque el daño siempre puede ir mayores, y llegar a convertirse en una gran grieta, o varias, que atravesará toda la luna, y hará necesaria su sustitución. Así pues, hay una primera razón de peso para ponernos manos a la obra, y hacer que nos arreglen esa grieta: la económica.
Pero hay otra aún más importante: la seguridad. En la gran mayoría de las ocasiones, por no decir siempre, el cristal afectado es el delantero, un elemento de visibilidad durante la conducción. A medida que la grieta crece, se hará más molesta. Y si está en el campo de visión del conductor, no pasaremos la ITV, otra razón más a tener en cuenta.
A corto plazo, si no podemos reparar la grieta, podemos usar una calcomanía para grietas que ayudará a que el problema no se agrave debido a la humedad y la suciedad. También hay a la venta kits de reparación que incluyen una resina que consigue que el problema no vaya a más. Aun así, es importante acudir cuanto antes a nuestro taller de confianza.
Mientras tanto, hay que evitar situaciones como cambios bruscos de temperatura o vibraciones en la conducción. Deberíamos eludir carreteras en mal estado a la hora de viajar e incluso acciones tan cotidianas como lavar el coche.
Reparar o reemplazar la luna
Si hemos actuado a tiempo, puede que no sea necesario cambiar el cristal delantero y sea suficiente con una reparación, pero dependerá también del tipo de rotura que presente la luna. Cuando se pueden observar grietas de cierto tamaño o incluso pequeñas fisuras en forma de estrella, lo más probable es que tengamos que afrontar el gasto (o que lo haga nuestro seguro) de la sustitución del parabrisas.
Si eliges Volvo Cars para reparar o sustituir tu parabrisas agrietado, tendrás a tu disposición tanto piezas de repuesto de la marca como técnicos de la máxima capacitación para realizar el servicio. La primera decisión que tomarán, usando el programa de diagnóstico de Volvo Cars, es si se puede reparar la grieta o si hay que optar por un reemplazo de la luna.
Si el impacto es pequeño, los técnicos puede que solventen el problema con una reparación de la pequeña grieta, o del impacto en forma de ojo de buey, que tenemos en el parabrisas. El procedimiento consiste en eliminar al aire de la pequeña grieta con una bomba de vacío, para después rellenar el desperfecto con resina transparente con la ayuda de una lámpara UV. El objetivo es que se recupere por completo tanto la seguridad como la visibilidad del cristal delantero de tu coche.
Si los daños son mayores, hay que reemplazar la luna. Esto implica la correcta colocación del vidrio, pero también su precisa calibración, ya que esta influye en diversas funciones de seguridad, como la asistencia de mantenimiento de carril, la advertencia de fatiga y el frenado automático.