Concept Recharge: nuevas ideas para el futuro sostenible y eléctrico de Volvo Cars
Volvo Cars lleva mucho tiempo apostando por la sostenibilidad y la electrificación de sus coches.
En plena transformación del catálogo de coches Volvo, camino a una nueva generación de vehículos libres de emisiones contaminantes, la compañía cuenta con numerosas opciones híbridas y un solo modelo 100% eléctrico, el Volvo C40 Recharge.
Pues bien, el pasado verano conocimos el Volvo Concept Recharge, que la propia compañía define como un manifiesto de futuro de sus vehículos: un modelo eléctrico puro, que abandere la estrategia de producto de la compañía y que muestre el “próximo lenguaje de diseño”.
Concept Recharge: Un manifiesto del futuro de Volvo
En palabras de Robin Page, jefe de diseño de Volvo, el Volvo Concept Recharge “representa un manifiesto para el futuro totalmente eléctrico de Volvo Cars, así como un nuevo tipo de vehículo”.
Pero de lo que queremos hablar hoy es del diseño futurista y rompedor que tiene el Concept Recharge. La compañía apunta a que, al retirar el motor de combustión y “eliminar la complejidad” que eso entraña, los diseñadores encargados de traer a la vida este nuevo concepto pueden volver a explorar las proporciones del automóvil.
El “suelo” del vehículo es plano, y al retirar ese motor y cambiarlo por una batería completa, surge la posibilidad de aumentar la distancia entre ejes, el tamaño de las ruedas y conseguir así más espacio interior. Pero este cambio en el diseño, con un piso plano, también les ha permitido a los diseñadores reubicar los asientos y bajar el techo, pero manteniendo ese punto de vista elevado que tanto les gusta a los conductores de los Volvo XC40, XC60 y XC90.
El lenguaje de diseño puede ser novedoso, pero registra los fundamentos del fabricante sueco en cuanto a diseño escandinavo, y conceptos como el “menos es más”, donde se busca una ejecución de alta precisión en la que no hay elementos sobrantes y todo tiene su función y sentido.
La estrategia de producto de Volvo para el futuro
Volvo Cars admite que este Concept Recharge no solo recoge el próximo lenguaje de diseño de la marca, sino la estrategia de producto. Aquí hemos hablado largo y tendido sobre los compromisos de Volvo por reducir la huella de carbono: principalmente, vender únicamente vehículos eléctricos puros para 2030 y, para 2040, convertirse en una compañía circular y neutra desde el punto de vista climático.
Todas las estrategias puestas en marcha para readaptar sus procesos y hacerlos más sostenibles, se ponen a prueba en este Concept Recharge: energías limpias en la cadena de suministro, cambios en los procesos de fabricación, equipar a los vehículos con elementos reciclados y renovables, etc… Con todo ello, Volvo Cars espera reducir un 80% el impacto de CO2 en el ciclo de vida de sus vehículos, comparándolo con el Volvo XC60 de 2018, que ya es un coche reciente y en el que se habían incorporado ya medidas para su descarbonización.
Concept Recharge, como concept car o prototipo, es un vehículo para testear ideas que la compañía quiere implementar en su futuro catálogo. Owen Ready, responsable de Estrategia y Diseño de Marca en Volvo Cars, resume su intención así: “Con el Concept Recharge exploramos la tensión que existe entre la necesidad de mejorar la eficiencia y el deseo de tener el mismo espacio, la misma comodidad y la misma experiencia de conducción que con los SUV actuales”.
Un lenguaje de diseño innovador con el Concept Recharge
De nuevo, el Concept Recharge es la muestra de dos vertientes: primero representa la estrategia de la compañía de apostar por los eléctricos puros y la sostenibilidad en toda la producción; y por otro, presenta un diseño innovador y de futuro para las próximas gamas de vehículos Volvo. “Con el Concept Recharge hemos creado un espacio familiar, cómodo y funcional”, comenta Lisa Reeves, responsable de Diseño Interior. “En el habitáculo hemos conseguido sofisticadas formas mediante el uso de materiales naturales y la armonización de texturas y tonos, reflejando la elegancia atemporal del diseño escandinavo Premium”.
Este SUV eléctrico puro, como hemos comentado, es más bajo de techo pero mantiene el punto de vista elevado, principalmente porque elimina el motor de combustión y todo el espacio que ocupa. Por eso, es una forma de re-imaginar la aerodinámica, con detalles del diseño exterior que mejoran la circulación del aire, un nuevo diseño de las llantas y una parte trasera más vertical.
Y también esto va íntimamente relacionado con la sostenibilidad, pues la aerodinámica avanzada fomenta que haya un menor consumo y una mayor autonomía. “Aunque los consumidores siguen demandando las ventajas que aportan los SUV, nuestro objetivo es fabricar vehículos que ofrezcan toda la seguridad y el confort que buscan, pero que también reduzcan su impacto medioambiental”, apunta Owen Ready.