10 beneficios inmediatos si fueran todos los coches autónomos
Si todos los coches fueran autónomos es una web desde la que Volvo informa de cuáles serían las ventajas y beneficios sociales, económicos y medioambientales, las más inmediatas, en el supuesto de que la totalidad del parque móvil estuviera robotizado y de que todos los vehículos condujesen por sí mismos.
Beneficios sociales
- Adiós a los atascos: la comunicación entre vehículos permite una circulación más fluida, exenta de las variaciones bruscas de velocidad (acelerones y frenazos) que crean los “atascos fantasma”, aquellos que se producen por la imperfección humana de la conducción.
- Más sitio para aparcar: cuando los coches son capaces de ir por sí mismos a aparcar, el espacio y las plazas de aparcamiento se aprovechan mejor: el vehículo deja a los pasajeros en su destino y después vuelve a recogerlos, por lo que dónde quede aparcado el vehículo (por ejemplo, a qué distancia) se vuelve parcialmente irrelevante.
- Menos accidentes y mejor conducción: los coches autónomos se limitan a respetar las señales y las normas de tráfico, por lo que eliminan el factor humano de la ecuación (errores, comportamiento erráticos o emocionales al volante,…). Una mejor conducción significa menos accidentes, y si no hay accidentes no hay víctimas de tráfico.
Beneficios económicos
- Mayor productividad: todo el tiempo dedicado a conducir se puede dedicar a otras tareas durante el trayecto, o simplemente a relajarse para llegar al trabajo menos cansado.
- Menos costes por accidentes: en todo el mundo los accidentes de tráfico suponen miles de millones de euros de gasto en tiempo, daños materiales y daños personales. Si los coches autónomos eliminan los accidentes de tráfico se reduce todo ese gasto. Desaparece por ejemplo el coste de los seguros de coche y se pueden reducir los costes de los seguros médicos.
- Menos tráfico: gracias a los vehículos conectados y a los coches autónomos también significa menos horas perdidas en atascos in ítinere, ahorrando de este modo millones de horas cada año.
Beneficios medioambientales
- Menos consumo y emisiones: Mantener la velocidad constante y adecuada a las condiciones del tráfico en todo momento y anticiparse a las detenciones gracias a la comunicación entre vehículos resulta en una conducción más eficiente. La circulación en platooning (o “en fila india”) sincronizando entre vehículos la velocidad, las frenadas y la aceleración, reduce la distancia entre vehículos que funcionan así como un único vehículo de gran longitud. De este modo se optimiza el espacio en la carretera y se reducen la resistencia aerodinámica y el consumo.
- Hacia las emisiones cero: los coches autónomos hacen más fácil la movilidad eléctrica. El usuario ya no tiene que preocuparse por la carga de las baterías: en cambio es el vehículo el que se dirige a las estaciones de carga o de cambio de baterías cuando sea necesario y mientras que el vehículo no está en uso; durante las horas laborales o por la noche, por ejemplo.
- Vehículo más ligeros, con un consumo —de electricidad o de combustible— menor. El peso es el factor que determina en mayor medida el consumo de un vehículo. Pero cuando se erradican los accidentes de tráfico por la conducción autónoma, los coches ya no necesitan ser tan seguros. Esto permite aligerar la estructura y prescindir de elementos de seguridad, lo que resulta en vehículos más ligeros y por tanto más eficientes.
- Propiedad flexible: los coches autónomos ofrecen nuevas posibilidad para disponer siempre de un vehículo, pero sin pasar necesariamente por tener su propiedad. El hecho de que los vehículos autónomos acudan solos cuando hacen falta potenciará el uso de los vehículos compartidos.
Fotos | Volvo