¿Cómo desbloquear el freno de mano eléctrico?
La acción de tirar de la palanca del freno de mano para bloquear las ruedas del coche tiende a desaparecer, muy pocos modelos de coche lo incorporan ya. En su lugar se han impuesto los frenos de mano eléctricos que facilitan mucho esta acción. Basta con presionar o tirar de un botón situado en la consola central y los motores de los frenos traseros presionarán las pastillas o zapatas de los discos y las ruedas se bloquearán. También llamados frenos de estacionamiento electrónicos aportan varias ventajas frente a los mecánicos.
En primer lugar, se requiere menos esfuerzo porque se activan (y desactivan) con un dedo sin necesidad de tirar con fuerza subiendo el brazo. Por su diseño, mucho más pequeño, ocupan muy poco y liberan espacio entre los asientos delanteros. A la vez, este sistema resulta más seguro que el freno de mano tradicional, porque se obtiene un frenado más consistente que permite mantener el automóvil estable si necesitas detenerte a altas velocidades.
Cada vez es más común que los frenos de estacionamiento electrónicos integren la función de retención en pendientes, lo que supone unos arranques inclinados más sencillos, tranquilos y seguros. Otra ventaja más: normalmente no es posible arrancar el coche si está activado (una vez que el vehículo detecta que se está moviendo, el freno se desactiva automáticamente).
Muchos automóviles con frenos de mano electrónicos también incorporan una función de retención automática (auto-hold). Al activar este interruptor, con un simple golpe en el pedal del freno, el automóvil no se mueve cuando se detenga en un semáforo o un atasco. De esta manera, el conductor puede relajarse, ya que no es necesario que pise los pedales. Una luz en el tablero de instrumentos se enciende cuando se activa esta función y mientras el automóvil está parado; luego, cuando se pisa el acelerador, se desactiva de forma automática.
El freno de estacionamiento electrónico puede utilizarse como un sistema de frenado de respaldo de emergencia en caso de que falle el sistema de frenado del vehículo. En los Volvo Cars, fabricante de referencia en seguridad, en los casos en los que se debe frenar por una emergencia, el freno de estacionamiento electrónico se activa cuando el vehículo está en movimiento, simplemente subiendo y manteniendo levantado el mando o interruptor. El frenado se interrumpe cuando se suelta el mando, o si se pisa el acelerador.
No todo son ventajas: cómo actuar si surge un problema
Uno de los inconvenientes de este tipo de freno de mano más moderno es que al basarse en motores eléctricos, puede pasar que se quede bloqueado por falta de energía en caso de avería o si el coche se queda sin batería. Para salir de estas situaciones, algunos sistemas vienen preparados con un sistema manual que evita que el automóvil permanezca inmovilizado. Consulta el manual del coche para conocer cómo proceder, si es que no lo sabes.
Si no dispone de esta opción, en caso de bloqueo, deberás recurrir al servicio técnico y las manos de los mecánicos profesionales. Si el problema es la descarga de la batería, puedes arrancar tu automóvil con otro vehículo y unas pinzas o con un arrancador portátil.
El mantenimiento de los frenos de estacionamiento electrónicos resulta más complicado que los tradicionales. Los componentes electrónicos son generalmente más caros que las piezas de los frenos de mano convencionales, por lo que resulta más costoso reparar el freno de estacionamiento electrónico que los manuales. Al ser todo electrónico se necesita acudir a un taller para efectuar un escaneo del sistema informático que ayudará a determinar el fallo que impide el funcionamiento. Las revisiones periódicas del coche son la mejor opción para detectar problemas graves a tiempo.