La app para móviles DriveSafe monitoriza y evalúa la conducción en tiempo real, y emite avisos cuando detecta que no se está conduciendo de forma prudente. Ha sido desarrollada por el grupo de robotica y e-seguridad (RobeSafe) de la universidad de Alcalá.
Para evaluar la conducción, DriveSafe hace uso de los sensores del teléfono, del GPS, el sensor de movimiento o acelerómetro y de la cámara principal. Al usar la aplicación, el teléfono debe estar montado en un soporte de coche que permita a la cámara del teléfono ver las carretera desde un punto de vista parecido al que tiene el conductor.
De ese modo, DriveSafe puede evaluar cómo está siendo la conducción, si hay aceleraciones o desaceleraciones (frenadas) bruscas, como se realizan los cambios de carril, si se respetan los límites de velocidad en cada tramo, la distancia de seguridad y otras maniobras.
En la pantalla del teléfono, el conductor puede ver avisos y notificaciones de la aplicación de forma visual, sobreimpresas a la imagen que está captando la cámara del smartphone. Esta información se almacena en el móvil para que el conductor pueda consultarla después, junto con vídeos grabados automáticamente para registrar los momentos o maniobras de riesgo que haya podido cometer el conductor. Cada trayecto se almacena incluyendo la ruta sobre un mapa de Open Street Map (parecido a Google Maps) y se evalúa automáticamente, dependiendo del tipo de conducción: normal, torpe o agresivo.
Durante la conducción, la aplicación podrá emitir avisos visuales y sonoros para alertar al conductor, a modo de asistente a la conducción. Por ejemplo, si no se respeta la distancia de seguridad con el vehículo de delante o si se supera el límite de velocidad. También alerta con cada cambio de carril, lo que puede ser de ayuda en caso de distracciones.