En una reciente conferencia, Google ha dejado entrever algunas de las características del nuevo Android Auto renovado, tras unos cuantos años desde que llegó por primera vez al mercado. Esta nueva versión llegará el próximo verano a los principales modelos y cuenta con algunas nuevas características interesantes, tanto en cuanto a funcionalidad como a facilidad de manejo, con el objetivo de llegar a ser un sistema nativo de infoentretenimiento para 2020.
De momento Google apuntado a mejorar lo que ya existía, haciendo que usar la pantalla Android en el coche sea tan fácil como usar el smartphone, y permitiendo que funcionen más aplicaciones compatibles que aprovechen todas las posibilidades, desde los mapas de Waze a los podcasts. Básicamente se trata de hacer que esa transición “del teléfono al coche” sea completamente transparente. Y de paso han aprovechado para hacerle un buen cambio de imagen y modernizarlo.
Un primer punto es la mejora visual en el aspecto de Android Auto. Por un lado, la nueva versión se adapta a todo tipo de pantallas, de modo que aprovecha mejor la resolución, tamaño y proporciones de la pantalla de cada coche, con más zonas para mostrar mapas o imágenes y los botones de manejo de las apps. El nuevo diseño incluye mejores tipografías con letras más fáciles de leer, mayor contraste y el llamado “modo oscuro” para facilitar la lectura según las condiciones de luz.
Los coches son para ir de un sitio a otro, de modo que los mapas de navegación cobran un nuevo protagonismo, activándose tan pronto como se entra en el coche, y ya preparados con la ruta y destino que podemos llevar guardados previamente en el smartphone. Cuando se usa, la información de navegación permanece siempre en pantalla, pero también hay espacio para una barra de iconos, las indicaciones paso a paso y para manejar otras apps desde la pantalla principal (como por ejemplo las llamadas de voz o la música). En general, en el nuevo Android Auto se puede acceder a las funciones de siempre, pero con menos clics.
Otra función que solicitaban muchas personas es que al entrar al vehículo se pudiera reproducir la música sin interrupción, algo que ahora es automático tan pronto el smartphone y el Android Auto del vehículo se conectan: la música no se detiene y no hace falta pulsar nada para que aparezcan sugerencias de destinos, y el asistente de voz queda preparado para recibir órdenes. El asistente de voz, según Google ha dejado ver, también será más “inteligente” y podrá entender mejor las órdenes.
Para evitar despistes hay también un nuevo centro de notificaciones, donde se recopilan todas las notificaciones según llegan: llamadas recientes, alertas, mensajes… De este modo, se puede decidir cuándo es el mejor momento para verlas, escucharlas o contestarlas, lo que mejora la seguridad durante la conducción.