Es innegable que el rey de los navegadores para dispositivos móviles es Google Maps. En la mayoría de las ocasiones únicamente se utiliza para la consulta a través del buscador. Aunque tenga otras funciones, su principal objetivo es ser navegador para llegar de A a B, nos traslademos a pie, en coche, o de cualquier otra forma.
Lo cierto es que la búsqueda de direcciones, referencias y la navegación a través de Google Maps es sencilla y adaptada para todos, pero se pueden descubrir ciertos trucos y secretos que mejoran ostensiblemente la experiencia. Aquí tenéis los 5 mejores trucos para hacer tus viajes más eficientes, que nosotros resumimos a continuación.
Tiempo estimado de llegada
Ya no hay lugar para las discusiones de “cuándo vas a llegar” o “cuánto tiempo tardarás”. Si clicas en el punto azul que representa tu localización en tiempo real en Google Maps, obtendrás varias opciones: para este caso, podrás compartir tu posición para no dejar lugar a dudas sobre tu puntualidad. Y además, podrás guardar la ubicación exacta (si has acudido en coche) donde has aparcado, para evitar molestas confusiones de última hora.
Commuting: los desplazamientos habituales
En el mundo anglosajón se utiliza el término “commute” para referirse al traslado de personas de su vivienda a su lugar de trabajo. En Google Maps en castellano, el término que utiliza la aplicación es “desplazamientos habituales“. Al abrir la aplicación, disponemos de tres opciones en el menú de abajo, siendo la central estos “desplazamientos”, que previamente tenemos que configurar en “Ajustes”. Con darle a Google Maps las ubicaciones de nuestra casa y nuestro lugar de trabajo, y solo pulsando ese botón central, tendremos en tiempo real la información sobre transporte público o tráfico, necesario en nuestro desplazamiento. Por otro lado, también podemos configurar nuestra forma habitual de transporte, así como los horarios a los que nos desplazamos.
La mejor forma de acelerar los recados
Cuando llega el fin de semana, lo último que nos apetece es perder el tiempo en tareas que nos alejan del descanso y los planes de ocio. Si lo que realmente quieres es desviarte lo mínimo de los recados esenciales, existe un pequeño truco para que Google Maps te chive información necesaria: una vez nos encontramos en navegación, con las direcciones de nuestro camino ya establecidas, podemos abrir la barra de abajo y pulsar en “buscar en la ruta“. Este apartado nos dejará saber qué gasolineras, restaurantes, supermercados y cafeterías están más próximas a la propia ruta. También podremos hacer una búsqueda para encontrar un establecimiento específico.
Contar con los mapas, incluso con mala señal
En el caso de viajar a zonas remotas, donde la señal telefónica puede ser malísima, conviene tener en cuenta que quizá nuestro servicio de Google Maps no esté disponible. Para ello existe la opción de descargar a nuestro smartphone localizaciones o directamente regiones enteras. Solo hacer falta realizar una búsqueda de la zona que nos interesa y, en la ficha de la zona, nos permitirá descargar su mapa. Por otro lado, también se puede optar por la barra lateral, en la opción “mapas sin conexión”. En esta variante nos permite “dibujar” la zona en el mapa general.
Seguir tus propios pasos
Quizá una de las grandes curiosidades que tiene Google Maps (y lo más probable es que no conozcas), es que puedes hacer un seguimiento de lugares donde has estado. Lamentablemente (o quizá por suerte), solo se ajusta a las búsquedas que has hecho con la propia aplicación. Es decir, si un día utilizaste esta app para llegar a tu nuevo restaurante favorito, es aquí donde puedes rememorar dónde está situado. Consultando el timeline a través del navegador habitual (logueado en Google, obviamente) es la forma más sencilla. Aun así, aquí te explican cómo hacerlo en Android y en iOS.
