“Vamos a vender más de 600.000 vehículos totalmente eléctricos, lo que representará más del 50% de nuestras ventas en 2025, y ya en 2030 seremos una empresa de automóviles completamente eléctricos”, anunció Henrik Green, director de tecnología de Volvo en la apertura del evento online Volvo Cars Tech Moment, celebrado en la sede central de la multinacional en Gotemburgo. En esta conferencia, el fabricante de vehículos sueco explicó cuáles son sus audaces objetivos para los próximos diez años y en qué tecnologías y asociaciones estratégicas se basará para lograrlos y posicionarse a la vanguardia de la electromovilidad en 2030, año en que solo venderá vehículos eléctricos puros.
Como parte de los ambiciosos planes de la compañía, Håkan Samuelsson, CEO de Volvo, resaltó el acuerdo con el fabricante de baterías sueco Northvolt. Esta empresa proveerá de baterías a Volvo Cars de forma responsable mediante la tecnología blockchain para garantizar la transparencia en la trazabilidad. La sostenibilidad es otro de los puntos fuertes de las baterías, ya que Northvolt prevé producirlas con energía 100% renovable, y Volvo facilitará su reutilización y reciclaje en recicladores autorizados. Además de más autonomía y una carga más rápida, este componente crucial para la eficiencia energética del vehículo integrará carga bidireccional: esta tecnología permite al usuario descargar el exceso de electricidad de la batería de su automóvil a la red eléctrica. La nueva generación de automóviles de Volvo ofrecerá una autonomía real de nada menos que 1.000 kilómetros y se cargará en la mitad de tiempo, “y serán los Volvos más seguros que se hayan fabricado”, afirmó Green.
Máxima seguridad contra colisiones mediante un sistema LiDAR
Parte de esa seguridad provendrá de la tecnología LiDAR de alta resolución de Luminar. Mediante este sistema de sensores y el software desarrollado por Zenseact, la nueva generación de coches eléctricos de Volvo Cars será capaz de recopilar datos en tiempo real de la conducción —si el usuario así lo autoriza— salvaguardando la privacidad de los mismos. Con esta información proporcionada por millones de automóviles, los ingenieros de Volvo Cars validarán y verificarán las características de la plataforma de conducción autónoma, con la posibilidad de introducir actualizaciones inalámbricas en tiempo real para aumentar la seguridad.
En el Volvo Cars Tech Moment, Håkan Samuelsson señaló que los automóviles convencionales se basan más en hardware y los eléctricos mucho más en software. Así, la compañía apuesta fuertemente por el desarrollo interno de software para su computadora centralizada con VolvoCars.OS. Este paquete de software se integrará completamente con el sistema de infoentretenimiento mediante Android Automotive OS tras llegar a un acuerdo estratégico con Google. Ambas empresas trabajan juntas para que la experiencia de usuario resulte sencilla, intuitiva y fluida, tanto por voz como de forma táctil a través de dos pantallas inteligentes, una para la visualización de los datos relevantes de la conducción situada enfrente del volante y la otra dispuesta en vertical en la consola central para todo lo relacionado con el infoentretenimiento.
En lo que respecta al hardware, además de asociarse con Northvolt y Luminar, Volvo tiene como partner a NVIDIA para la incorporación de los chips de esta compañía en el sistema de conducción autónoma de los coches eléctricos de la próxima generación, que alcanzará el siguiente nivel de seguridad, según destacó el CEO De Volvo.
El primer modelo de esta categoría que sube de nivel los coches totalmente eléctricos de Volvo se trata de un SUV que saldrá a la venta en 2022. Durante el Volvo Cars Tech Moment, la compañía dio algunas pistas de cómo será. Presentó un prototipo conocido como Concept Recharge, el cual presume de diseño rompedor y minimalista, con un espacioso habitáculo fabricado con materiales sostenibles y elegantes, al estilo escandinavo.