Redes neuronales mecánicas: materiales y estructuras que aprenden comportamientos mediante IA
Aunque suene más propio de las películas de ciencia-ficción que de algo que podamos ver hoy en día, un equipo de ingenieros mecánicos de UCLA ha publicado un trabajo sobre la creación de un nuevo tipo de material inteligente para formar estructuras que «aprenden» de las fuerzas que experimentan y pueden reaccionar en consecuencia. Con aplicaciones en proyectos arquitectónicos, industriales, aeronáuticos y probablemente automovilísticos, este material utiliza algunas técnicas propias de la inteligencia artificial (IA) para «aprender comportamientos» con el paso del tiempo, como ya hacen algunos robots, y adaptarse luego a las circunstancias.
Una estructura sensible y adaptable
La idea básica consiste en que el material forma una estructura mediante una especie de módulos ajustables capaces de cambiar ligeramente de forma. La estructura «siente» y puede autoajustarse; de ese modo, se convierte en una especie de material con estructura dinámica que podría recordar –en cierto modo– a los tejidos de los seres vivos, no algo inmutable.
Aprender y reaccionar
Los mecanismos son ajustables, de modo que se pueden programar para que, por ejemplo, compensen los cambios debidos a fuerzas externas y el material mantenga la forma original. De este modo se puede imaginar un edificio, un avión o la plataforma de un vehículo adaptándose a los cambios debidos a terremotos, vientos o vibraciones, ya sean pequeños movimientos sísmicos, turbulencias o las vibraciones propias de circular sobre el asfalto.
Es una curiosa aplicación de la IA en terrenos que en principio podrían parecer estar muy alejados: la arquitectura, la industria y sus materiales más básicos, lo que podría dar lugar a interesantes progresos.
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