El valor venal de un coche es, en pocas palabras, el valor de ese coche usado en el momento en que nos planteamos su venta, o lo que es lo mismo, va a ser el resultado de tasar el coche para vender en el mercado de segunda mano. Este precio dependerá de factores como el estado del vehículo, su antigüedad, y en función también de las leyes del mercado en ese momento.
Este es el valor que suelen tener en cuenta las aseguradoras a la hora de plantearse una indemnización por siniestro, aunque puede haber excepciones. Normalmente, a partir del cuarto año de uso del coche se utilizará el valor venal como base para una posible indemnización.
Una de las principales características del valor venal es que, a partir del primero o segundo año de “vida”, nunca es el mismo que el precio de un coche nuevo, que es el precio de concesionario incluyendo transporte e impuestos. Es así porque con la antigüedad del coche, su precio se devalúa constantemente. Si se da el caso de que la aseguradora sí indemniza con el valor de nuevo (es decir, si la póliza contratada incluye esa cláusula), esta puede hacer el pago en especie o en capital.
Cómo se calcula el valor venal del coche
Para saber el valor de mercado de un coche podemos utilizar varias herramientas. La primera es un listado con las valoraciones del Ministerio de Hacienda que cambia periódicamente y que se publica en la forma de tablas. Es posible su consulta a través de este enlace, que nos lleva a la Orden HAP/2367/2013, y en el que podemos descargar un fichero PDF con todos los vehículos posibles (incluídas embarcaciones). Es una opción tediosa por el tamaño de las tablas.
Otra forma más sencilla de saber cuánto vale el coche es utilizar una calculadora online que, introduciendo la matrícula para estimar la “edad” del coche desde su matriulación, nos permite conocer el valor venal tras especificar la marca, tipo de motor y el modelo específico. Una calculadora bastante útil se encuentra tras este enlace.
Como pista del valor que obtendremos al hacer los cálculos tenemos esta tabla de equivalencias, que nos dice el porcentaje del valor de coche nuevo que representa el valor venal en el momento en que queramos hacer el cálculo:
- Hasta 1 año: 100%
- Más de 1 año, hasta 2: 84%
- Más de 2 años, hasta 3: 67%
- Más de 3 años, hasta 4: 56%
- Más de 4 años, hasta 5: 47%
- Más de 5 años, hasta 6: 39%
- Más de 6 años, hasta 7: 34%
- Más de 7 años, hasta 8: 28%
- Más de 8 años, hasta 9: 24%
- Más de 9 años, hasta 10: 19%
- Más de 10 años, hasta 11: 17%
- Más de 11 años, hasta 12: 13%
- Más de 12 años: 10%
Como vemos, a partir del primer año el valor del coche cae hasta el 84% de su precio como coche nuevo, salvo que hayamos contratado una póliza que alargue el período hasta el segundo año de uso del vehículo. Como curiosidad, a partir de los 5 años (un período de tiempo en el que muchas personas se plantean cambiar de vehículo), el valor venal ha caído hasta el 39% de su valor en el momento de la compra.
Hay algo más, y es que para cualquier vehículo que haya tenido un uso para alquiler de vehículos sin conductor, como taxi o como coche de autoescuela de forma profesional, y por encima de seis meses, debemos aplicar un 70% al porcentaje correspondiente en la tabla anterior. En el ejemplo del vehículo a partir de 5 años, el porcentaje resultante como valor venal será del 27,3%.
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