Si Volvo Cars ya tiene la seguridad como su sello de identidad, ahora han dado un paso hacia delante, coincidiendo con la puesta de largo, que tendrá lugar en noviembre de 2022, del nuevo Volvo EX90, un SUV totalmente eléctrico. La seguridad y la sostenibilidad siguen marcando de forma ineludible la hoja de ruta de la marca.
Con el concepto seguridad en mente comienza una nueva era, en la que no sólo se van a preocupar por saber qué es lo que está pasando en el entorno del vehículo. Esta nueva idea de seguridad también busca comprender al conductor, detectar si algo no va bien en su comportamiento y ayudarle en caso de que sea necesario. Se trata de escribir una nueva página en la relación de Volvo con la seguridad, y todo ello gracias a la innovación y la tecnología.
El propio director ejecutivo de Volvo, Jim Rowan, fue el encargado de explicarnos qué es este nuevo concepto, basado en entender la experiencia humana. El nuevo Volvo EX90 está diseñado para entender tanto a su conductor como a su entorno. Es un punto de partida, ya que hablamos de un sistema de seguridad que aprenderá de los datos analizados y recibirá actualizaciones.
Y si el software es el corazón del sistema de seguridad, los sensores son sus ojos. Hablemos de lo que estos sensores, tanto dentro como fuera del vehículo, pueden hacer para reducir el número de accidentes Siempre teniendo en mente que en el ADN de Volvo Cars está el objetivo de que algún día esta cifra sea cero.
El mundo es más seguro a través de los ojos de tu Volvo
Y cuando hablamos de ojos, pongamos algunos números sobre la mesa, estamos hablando de 8 cámaras, pero también de 5 radares y 16 sensores ultrasónicos. Y además, incorpora un sensor LiDAR de última generación. Más que de la vista, estamos hablando prácticamente de los 5 sentidos del vehículo puestos al servicio del conductor y sus ocupantes.
Del sistema LiDAR ya hemos tratado en algunas ocasiones en Tecvolución. Volvo lleva trabajando en esta tecnología desde que adquirió una participación en Luminar Technologies a principios de 2018. Gracias a este tipo de sensor de última generación se escanea el entorno frente al vehículo, generando una interpretación tridimensional. Tú coche podrá ver cosas que tú no eres capaz de ver.
LiDAR (Light Detection and Ranging) es un sistema que utiliza la luz en forma de láser pulsado. Es un método de detección remota que actúa con altísima precisión. Puede, por ejemplo, detectar a un peatón a una distancia de hasta 250 metros o un obstáculo pequeño en una carretera negra a 120 metros. Según estudios de Volvo, incorporar el sistema LiDAR a un vehículo, ya de por sí seguro, puede reducir los accidentes graves hasta en un 20% adicional, y el conjunto de los accidentes hasta en un 9%.
Con todos los sensores trabajando juntos, y gracias a un software que interpreta toda la información recibida, disponemos de un escudo de protección de 360 grados. El coche es capaz de detectar más peligros que nunca en su exterior. Pero hablemos ahora de lo que pasa en el interior del vehículo.
Un sistema de seguridad que se pone en tu piel
Todos nos consideramos buenos conductores, pero no siempre estamos al 100% y nadie está libre de cometer un error de forma puntual. Hay situaciones, como el cansancio, la somnolencia o el estrés, en las que incluso el mejor de los conductores puede agradecer un poco de ayuda.
En eso consiste el nuevo sistema de comprensión del conductor que incorporará el Volvo EX90. Tradicionalmente se ha trabajado en que el vehículo “entienda” lo que está pasando en su exterior y cómo puede afectar a nuestra seguridad. Ahora también “comprenderá” lo que está pasando en el interior del habitáculo. Y si el conductor no está en el estado óptimo para conducir, el vehículo se asegurará de que toma las medidas oportunas para garantizar la seguridad de todos los ocupantes.
El sistema de comprensión crea un escudo de seguridad que el conductor sólo percibirá si lo necesita. Lo hace gracias a dos sensores interiores y un volante capacitivo, que proporcionan los datos necesarios a un algoritmo que se comunica con los sensores exteriores del coche.
Las cámaras interiores detectan hacia donde miras o si distraes tu atención, por ejemplo, con un móvil. El volante informa si lo sueltas. Las medidas correctoras pueden ir desde una señal acústica de aviso que va aumentando su intensidad, hasta que el propio vehículo se detenga a un costado de la carretera y encienda sus luces de emergencia.
