Para hablar de qué es un SUV eléctrico, lo primero es tener claro qué significa SUV, algo que ya os hemos contado en este blog. SUV es un acrónimo que surge de las palabras Sport Utility Vehicle, cuya traducción literal sería “vehículo utilitario deportivo”.
Son vehículos que tienen tracción en las cuatro ruedas y una mayor altura libre desde el suelo, pero no son todoterrenos, aunque sí pueden circular por carreteras sin asfaltar. A la vez, es un vehículo que puede desenvolverse sin problemas por zonas urbanas.
Un coche, en definitiva, que se puede definir como un cruce entre un turismo y un todoterreno. Todo esto os lo explicamos con detalle al hablar de las diferencias entre SUV y crossover.
SUV eléctrico
Expuesto lo que es un SUV, ahora es tan sencillo como explicar que podemos encontrar en el mercado vehículos de este tipo con diferentes motorizaciones. En su momento nos detuvimos a explicar qué es un SUV microhíbrido. Exactamente igual se puede hablar de SUV híbrido enchufable y de SUV eléctrico, que sería cualquier coche eléctrico, es decir, que utiliza en todo momento la electricidad para impulsarse, y que cumpla con las características que hemos explicado para ser un SUV.
Una forma de clasificar a los SUV es según su tamaño y capacidad:
- SUV pequeños: A-SUV, de menos de 4 metros de largo, y B-SUV, de 4,2 a 4,5 metros.
- SUV medianos: C-SUV, que van de los 4,4 a los 4,7 metros de longitud, y los D-SUV, que van de los 4,7 a los 5 metros.
- SUV grandes: E-SUV y F-SUV, de más de 5 metros de largo.
Los SUV más pequeños podrían ser considerados crossovers en función de algunas de sus características. Y a mayor tamaño, mayor probabilidad de que el coche cuente con tracción integral. Cualquier clasificación que establezcamos puede ser un tanto arbitraria y tendrá excepciones. Como vamos a ver ahora, también podríamos segmentarlos por su precio de marcado. En parte coincidirá con la clasificación por tamaño, pero no tiene por qué.
Mejor SUV eléctrico
Precisamente, la clasificación que ha establecido Diario Motor en su guía de compra con los mejores SUV eléctricos de 2024, divide a los vehículos en función de su precio. En las dos primeras categorías, ambas con precios de venta por debajo de los 50.000 euros, han incluido dos vehículos SUV de Volvo.
Por un lado, el Volvo EX30, el SUV eléctrico más compacto de Volvo Cars, de 4.233 mm de longitud, y el que tiene una menor huella de carbono de los fabricados por la marca hasta la fecha. Por otro lado, el Volvo EX40, un vehículo que destaca por su potente aceleración y su conducción ágil.
Mejor SUV eléctrico premium
Siguiendo con la misma guía de compra, han considerado vehículos SUV eléctricos premium a aquellos con un precio de venta mayor de 50.000 euros. De nuevo, insistir en que cualquier clasificación es relativa.
Entre los cinco vehículos que han seleccionado aparece el Volvo EX90, el SUV 100% eléctrico premium de Volvo Cars, con 7 plazas. Un vehículo que la marca presentó como el primero de una nueva era, en cuanto a seguridad, sostenibilidad y conectividad. Desde septiembre de 2024 ya está listo y en la carretera, siendo enviado a los distribuidores de Estados Unidos y Europa.
Autonomía de los SUV eléctricos
El concepto de autonomía al hablar de un coche eléctrico se refiere a la distancia que puede recorrer con una sola carga de su batería. Obviamente, este va a ser una de las características que vas a tener en cuenta a la hora de valorar la adquisición de tu vehículo eléctrico, tanto si es un SUV como si no.
En Europa la autonomía de un coche eléctrico se calcula a través de un conjunto de pruebas que se denomina ciclo WLTP (Worldwide harmonized Light vehicles Test Procedure). Para saber la autonomía de un vehículo eléctrico concreto necesitas tener dos datos: la capacidad de la batería expresada en kWh y el consumo medio de batería medido en kWh/100km.
La mayoría de los coches eléctricos tienen autonomías que van desde los 200 hasta los 600 kilómetros, y si nos centramos en la autonomía de los SUV eléctricos más populares, los consumos van desde los 400 hasta los 600 kilómetros realizados para cada carga.
Hay que tener en cuenta que, por un lado, tenemos la autonomía teórica, dada por el modelo que compremos, la capacidad de la batería, su tecnología y la eficiencia del motor eléctrico. Pero después nos van a influir otros factores como nuestro estilo de conducción, la carga que acarrea el vehículo, la climatología o el tipo de ruta. También tenemos que tener en cuenta que sistemas auxiliares como la calefacción o el aire acondicionado van a consumir energía.
Si nos detenemos en algunos de los vehículos SUV 100% eléctricos de Volvo tenemos, por ejemplo, el Volvo EX30 que en su opción Single Motor Extended Range y alcanza una autonomía de 476 kilómetros. El Volvo EX40 tiene una autonomía de hasta 574 kilómetros. Y, por su parte, el Volvo EX90 ofrece un alcance de alrededor de 600 kilómetros con una sola carga (la batería puede pasar del 10% al 80% en unos 30 minutos); concretamente hablamos de una autonomía eléctrica teórica de 624 kilómetros.
