Hay diversas formas de abordar la descripción de las partes que componen un coche. Por ejemplo, cuando hablamos de las partes de un coche eléctrico nos centramos en los componentes de su interior, todo aquello que hace que un vehículo funcione, como su motor, la transmisión, las baterías…
Pero partes fundamentales de un vehículo, cuyas diferencias ya os hemos explicado en alguna ocasión, son también la carrocería y el chasis. Entre ambos forman la estructura básica de un coche.
La carrocería contiene todo el equipamiento de un coche, incluyendo los asientos, y es el exterior del vehículo, lo que protege a los ocupantes. El chasis soporta tanto la carrocería como los dispositivos necesarios para conducir un coche. Parte fundamental del chasis es el bastidor, que podemos considerar el esqueleto de los vehículos.
¿Cuáles son los elementos exteriores de un coche?
Como elementos exteriores de un vehículo vamos a considerar, por un lado, las partes que conforman la carrocería y se ven desde el exterior, pero también otros elementos “adosados” a ella, como las lunas, los pilotos y los faros.
Capó
El capó de un coche es la parte de la carrocería que cubre el motor y otros componentes del vehículo en la parte delantera. Es la “tapa” que abrimos para acceder al motor y realizar tareas de mantenimiento, como revisar el aceite, el líquido refrigerante o hacer reparaciones. También juega, como casi todos los elementos que mencionaremos, una función estética.
Paragolpes delantero y trasero
Los paragolpes o parachoques, son dos elementos de la carrocería que forman parte de la seguridad pasiva de nuestro vehículo. Los materiales más comunes en la fabricación de los parachoques son el aluminio, la fibra de vidrio, el acero y los materiales plásticos. Su función es amortiguar los golpes y proteger la carrocería.
Aletas delanteras y traseras
Son los paneles de la carrocería que se sitúan sobre las ruedas, a ambos lados del vehículo, protegiéndolas de la suciedad, de pequeñas piedras y del agua. También sirven como conexión de otros elementos de la carrocería e influyen en la aerodinámica del vehículo.
Puertas
Poco que comentar sobre su función, tan solo añadir que también son un elemento de protección. Pueden ser convencionales o correderas (generalmente en vehículos grandes) y tienen una ventana que se puede abrir como parte de su estructura.
Estribo bajo puerta
El estribo bajo puerta es la parte inferior de la carrocería que se encuentra, como indica su nombre, justo debajo de las puertas. Además de una función estética y de protección, en vehículos altos ayuda a acceder al habitáculo.
Portón trasero o tapa de maletero
Hablamos, claro está, del acceso al maletero del vehículo. Generalmente, lo denominamos tapa de maletero si este está totalmente separado del habitáculo. Y lo llamamos portón trasero si, como ocurre en los SUV, los coches hatchback y en la mayoría de los vehículos familiares, es una puerta grande que permite acceder a un maletero conectado con el habitáculo.
Techo
Otro elemento del vehículo que suscita pocas dudas. Situado en la parte superior del coche, proporciona estabilidad a la carrocería y ofrece protección a los ocupantes. También proporciona aislamiento acústico y térmico. Son totalmente rígidos, con una parte corrediza (solares) y también tenemos los techos panorámicos, cuando toda la superficie del techo es de cristal. Cuestión aparte son los coches descapotables.
Faros y otras luces del vehículo
Sobre los tipos de faros de un vehículo ya hemos hablado de forma pormenorizada. Más allá de consideraciones estéticas, recordemos que los faros son un elemento de la seguridad activa del coche, ya que sirven para ver nuestro entorno, pero también para que nosotros seamos vistos por peatones y otros vehículos.
Además de los faros, el exterior de un vehículo cuanta con otro tipo de luces, como las luces antiniebla, las luces de posición o las luces de freno. Y, por supuesto, los intermitentes, ubicados en la zona externa de la parte delantera y trasera. Y en muchos modelos de coche en los laterales (en algunos casos en los propios retrovisores). Todas las luces mencionadas son importantes para la seguridad del vehículo y de sus ocupantes.
Cristales
Los cristales son uno de los elementos de la seguridad pasiva de un vehículo. Todos los coches cuentan con el parabrisas, en la parte delantera, la luna trasera y los cristales de las ventanillas. Otro tipo de cristal son las llamadas lunas custodia: esa parte, generalmente de forma triangular de las ventanas del coche que es fija, no se puede abrir.
El parabrisas suele estar fabricado en vidrio laminado (dos capas de vidrio separadas por un polímero) para que no se rompa en miles de trozos en caso de accidente. La luna trasera y los cristales laterales generalmente son de vidrio templado; este tipo de cristal es muy resistente, pero puede romperse en caso necesario, por ejemplo, para sacar a una persona del coche.
