Desde que entraron en vigor las etiquetas medioambientales de la DGT para clasificar a los vehículos según su impacto ambiental, han surgido dudas al respecto de su aplicación y a qué modelos aplica cada categoría. De hecho, en zonas con restricciones severas de circulación como puede ser Madrid Central, las dudas son todavía mayores. Nos centraremos en lo que respecta a los coches híbridos, ¿pueden considerarse cero emisiones? ¿Cuándo?
Cuándo se considera a un coche híbrido “Cero emisiones”
Recordemos que el distintivo cero emisiones aplica a vehículos eléctricos de batería (BEV), vehículos eléctricos de autonomía extendida (REEV), vehículos eléctricos híbridos enchufables (PHEV) con una autonomía mínima de 40 kilómetros o vehículos de pila de combustible. Esta etiqueta permite a estos tipos de vehículos circular sin restricciones en las diferentes áreas prioritarias o en cualquier escenario en que se aplique un protocolo de contaminación severo.
Hemos de decir que “cero emisiones” no quiere decir que estos vehículos no realicen emisiones contaminantes, sino que éstas son mínimas en el cómputo global —o nulas en caso de estar circulando en modo 100% eléctrico. El distintivo cero emisiones se otorga a los coches capaces de recorrer 40 kilómetros, o más, en modo eléctrico porque es una autonomía suficiente para resolver gran parte de un desplazamiento urbano normal.
Nuevos protocolos de homologación
El mes de septiembre pasado, en 2018, entró en vigor el nuevo protocolo de homologación WLTP. Este protocolo sustituyó al vetusto ciclo NEDC, un protocolo que se mostró definitivamente desfasado ya que ofrecía unos datos de consumos y emisiones muy alejados de la realidad. El problema principal del NEDC era que sus simulaciones no eran realistas y siempre en laboratorio.
Por el contrario, el WLTP es un protocolo más ajustado a la realidad actual, a cómo se realizan los desplazamientos típicamente en las ciudades y el resto de vías. El nuevo protocolo —cuyas siglas significan Worldwide harmonized Light vehicles Test Procedure— se realizará en conjunto con una prueba en carretera denominada RDE —Real world Driving Emissions—, de manera que una vez terminados los procesos se obtendrá una cifra de “consumo homologado real” que será la referencia para el mercado, y para los distintivos medioambientales de la DGT.
Así pues, los requisitos para que un híbrido sea cero emisiones son los mismos que anteriormente, pero hay que tener en cuenta que el protocolo aplicado es el WLTP, no el NEDC.
Estos procedimientos entraron en vigor desde el pasado 1 de septiembre de 2017, y se hizo obligatorio para los modelos nuevos a partir del 1 de septiembre de 2018. De todos modos, todos los nuevos modelos y motorizaciones de Volvo Cars indicaban los valores WLTP en la documentación del vehículo (CoC – certificado de conformidad) desde septiembre de 2017. Desde esa fecha hasta septiembre de 2018 se realizó la conversión de valores NEDC a WLTP en el resto de modelos de Volvo Cars. Desde el pasado 1 de enero de 2019 es obligatorio reportar los valores de emisiones de CO2 según el criterio WLTP.