¿Puede la tecnología ayudarnos en una ingrata tarea como es eliminar la basura que se acumula en las playas, parques, calles y otros lugares debido a la afluencia de visitantes y turistas? Parece que sí, y además conseguirlo de forma eficiente no parece estar reñido con que tenga un toque simpático y futurista.
Un proyecto robótico con «aspiraciones»
Este curioso robot cuadrúpedo llamado VERO lleva a cabo esa tarea moviéndose lentamente por su entorno y aspirando con sus cuatro patas todo lo que se le ponga por delante y merezca ser aspirado: colillas de cigarrillos, papeles, plásticos… Lo único que hace es caminar lentamente, observando y aspirando.
Su apariencia de mascota amable e inofensiva, su aspecto con un par de ojos aparentes y la cadencia de sus movimientos recuerdan un poco a los robots de ‘Star Wars’ o ‘Naves silenciosas’. Está en cierto modo antropomorfizado y se parece más a un ser vivo que a un brazo robótico o a una aspiradora.
VERO es un proyecto desarrollado por el Laboratorio de Sistemas Dinámicos con Patas (sí, se llama así) del Instituto Italiano de Tecnología. El objetivo era demostrar que se puede utilizar un robot cuadrúpedo para tareas cotidianas de forma eficiente, y según cuentan los investigadores es uno de los primeros prototipos en lograrlo en el terreno de la limpieza a partir de ese planteamiento.
La suciedad: un problema global
VERO combate infatigablemente contra las pequeñas basuras que por desgracia invaden calles, parques y playas. Tal y como se ve en el vídeo, una de sus especializaciones es recoger colillas de cigarrillos, que están en el top de los objetos-basura más comunes que se pueden encontrar en el suelo. En todo el planeta se tiran al suelo unos 4.500 millones, con lo que eso supone de suciedad, que además es peligrosa por los productos químicos que contienen. Lo interesante es que aunque sus movimientos son lentos, no habría problema en dejar unos cuantos VERO dando vueltas por la playa o el parque para encontrárselo limpio a la mañana siguiente.
El pequeño robot realiza la recogida de basura gracias a 4 potentes tubos de aspiración que se extienden a lo largo de sus patas. Simplemente se sitúa junto al objeto a recoger y se activa para succionarlo. Lo interesante es que este tipo de robots funcionan bien en terrenos irregulares, con piedras, arena y similares. Nada parece estorbar al incansable y simpático robot.
Alta tecnología para una tarea mundana
Como es normal hoy en día en este tipo de inventos, VERO va equipado con algunos sensores y un par de cámaras especializadas apuntando al suelo que proporcionan imágenes y profundidad (distancia exacta a los objetos). También cuenta con diversos servomotores para afinar los movimientos de las patas y la recolección.
El robot está controlado mediante diversos algoritmos de IA, especialmente los relativos a los movimientos al caminar y girar y los de reconocimiento de imágenes para distinguir las colillas del resto de objetos del entorno. Si no tiene muy claro que un objeto sea basura, simplemente se mueve un poco buscando otro ángulo desde el que evaluarlo. Es tan hábil que puede aspirar mientras camina, sin tener que detenerse.
La navegación de VERO es autónoma, y puede desplazarse con habilidad por entornos como parques infantiles, playas abiertas o parques; en total los investigadores han probado seis entornos diferentes. Es capaz de subir escaleras sin mayores problemas y las pequeñas rocas tampoco parecen suponerle un problema.
VERO es aparentemente bastante silencioso (dentro de lo que puede ser silenciosa una aspiradora), lo cual se agradece, y desde luego nada tiene que ver con el clásico tractor limpia-playas que podemos escuchar desde la ventana en las noches de verano. Definitivamente, un robot que a muchos no nos importaría ver trabajando en el parque o la playa para encontrarla limpia y perfecta a la mañana siguiente.